¡Ole Torito! era la arenga que nos decíamos cuando jugábamos de chicos, era un Ole potenciado, una frase que no tenía una explicación, un grito que nos desbordaba!!!
Con el Ole Torito nos dábamos fuerza, porque era gritar que no siempre el más fuerte ganaba... y así pasaba por al lado el que nos iba pegar la mancha pero en una épica nos escapábamos como gatos.
El que casi salía primero en la carrera por condiciones pero al final ganaba el que era más tortuga, y así recuerdo gritar con mi hermano, con fervor y felicidad: ¡Ole Torito no pudiste con nosotros! .
Ole Torito es juego, pero es justicia. Es juego honesto: los buenos siempre ganan.
Hoy ya adultos hay muchos Ole que deseamos gritar...así nace esta propuesta. Por eso hacemos arte textil y ropa que habla, y ropa que nos sirve de excusa para expresarnos, para defender causas, para creer que no siempre los poderosos ganan el juego.
Desde mi lugar me defino Feminista, Luchadora, Optimista y Mujer Empoderada, de ahí mis luchas y mis causas. . Seguimos jugando, seguimos soñando, seguimos intentándolo.